En mi país (España) este asunto sigue igual que con la dictadura de Franco; o sea que para instalar una emisora tienes que tener el permiso gubernamental, reservándose el Gobierno el control de todo ello y mediante concesiones a quienes les son afines, concedieron privilegios con lo que se han creado centros de poder, que en realidad son monopolios que explotan, lo que ya dijo (sintetizando) un tal “Murdoch”… “Instalar una estación de televisión es una mina para obtener dinero en cantidad” (cito de memoria, pero sobradamente conocido es el anciano y potentísimo dueño de grandes cadenas de medios de comunicación “o de lo que sean”); el que también dijera que “los artículos e informaciones”, son esas cosas que hay en los periódicos, entre los anuncios, que es lo que interesa puesto que son los que aportan dinero.
Se trata de: Keith Rupert Murdoch (nacido el 11 de marzo de 1931), es un magnate estadounidense nacido en Australia, es director y principal accionista de News Corporation; entre otras muchas empresas “del ramo”. En definitiva es el más destacado de una serie de otros “similares” que hay en cualquier país donde con su influencia… “pueden hasta cambiar gobiernos”; es claro que pensando sólo en sus intereses… pero los políticos suelen “estar a su servicio por cuanto los necesitan para sus propagandas masivas”.
Por tanto es mentira eso que tanto nos dicen nuestros políticos (en el Gobierno o fuera de él) de la tan cacareada libertad, palabra para mi, de las más prostituidas de todas las que a diario emplean los irresponsables; puesto que la libertad sin llegar a ser lo que cada cual quiera hacer, tiene un gran significado y debiera exigirse su cumplimiento como por ejemplo, en el tema que hoy toco, aunque hay muchos más.
¿Por qué entonces usted o yo y teniendo los medios económicos suficientes, no podemos instalar una emisora de radio o de televisión, en nuestro pueblo, ciudad, o incluso en el barrio?... sencillamente, no interesa a quienes gobiernan, mientras ellos sí que tienen el libertinaje (ya digo que libertad es otra cosa y debe ser igual para todos) de abrir, cerrar, mantener e incluso emplear sectariamente esos medios, que hipócritamente nos dicen que son públicos… y lo son, pero simplemente para que los paguemos vía impuestos, como ocurre en la ciudad donde vivo y que siendo una pequeña capital de provincia de unos ciento quince mil habitantes, se ha sabido ocho años después… lo que han malgastado, los derrocados políticos; puesto que es un suponer que si sabemos lo que sigue, es por cuanto interesa a los nuevos, que por otra parte, nada dicen de cerrar “ese pozo sin fondo”; lean la noticia.
Leo en la prensa diaria (Viva Jaén 22-05-2008) lo que sigue: “Onda Jaén acumula una deuda de 16 millones desde su creación en el año 2000 – A falta de auditoria. Por si alguien no ha echado cuentas, esa brutal cantidad, equivale a 2.662.180.000 (dos mil seiscientos sesenta y dos millones, ciento ochenta mil pesetas). ¿Esto no debiera estar penado con condenas de cárcel y exigencia de daños y perjuicios?... pues no, en absoluto.
Pero este no es un caso aislado en España; puesto que si nos vamos a las emisoras del Estado, a las de las “diecinueve autonomías” (Gobiernos autonómicos) y los cientos y cientos, o miles de ayuntamientos y otras corporaciones; este fraude de dinero público, daría cantidades bochornosas.
Denunciar todo ello no sirve para nada y tenemos larga experiencia de ello, puesto que viene desde la dictadura, pero entonces había “cuatro gatos” en relación a los infinitos tinglados creados después; puesto que cada “reyezuelo” ha instalado sus medios en su feudo, mientras férreamente no deja que la ciudadanía instale otras emisoras, simplemente para manifestarse sin tanta presión política y partidista.
Entonces no existe libertad, puesto que la que existe, está limitada a que encuentres el medio de expresarla y luego una vez expresada, no surte efecto; por tanto y como le atribuyeron a Lenin… ¿Libertad… para qué?... la libertad para el gobernante (comunista o no) siempre ha de ser… “libertad vigilada y controlada” y sobre esa base, que cada gobernante haga lo que le de la gana.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
Fuente: laRioja.com
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