lunes, 29 de diciembre de 2008

ESPAÑA: Ràdio Tàrrega, la voz de l’Urgell

Desde el ya lejano año 1954, el 12 de diciembre emitió por primera vez, la emisora siempre ha sido una radio pública dependiente de diversos organismos que, atendienda la legislación existente en cada momento, iba cambiando de nombre oficial a pesar de que siempre ha sido conocida como Ràdio Tàrrega.

Se fundó incluida en la Red de Emisoras del Movimento, y pasó por la CES, la Voz del Urgel y la Segarra, la Voz Sindical de Lérida, Radio Cadena Española, Radio Nacional de España y Radio 4. En 1993, después de permanecer clausurada unos meses, pasó a depender del Ayuntamiento con el nombre de “La veu de Tàrrega” y finalmente el 20 de septiembre de 1999 registra y oficializa en la Oficina de Patentes el de Ràdio Tàrrega.

La inauguración de la emisora de la capital de l’Urgell se celebró con toda pompa y boato con la bendición del entonces obispo de Solsona, Vicente Enrique Tarancón, y la presidencia del Gobernador Civil de la Provincia, José Pagés.

Estaba situada en un edificio, hoy desaparecido, de la Avenida de Catalunya donde permaneció hasta 1988 cuando se trasladó a las actuales instalaciones de la calle Santa Anna.La puesta en marcha de la emisora, que dió un gran prestigio a la ciudad, fue posible gracias a la aportación económica de 100.000 pesetas del industrial Jona Burgués y un préstamo a fondo perdido de otras 50.000 por parte de la Delegación de Sindicatos.Al equipo amateur que se encargó de la programación le faltaba experiencia pero le sobraba entusiasmo. Para asesorarles en los primeros pasos contaron con la colaboración de un periodista profesión de Radio Nacional de España en Barcelona Germán Mirás.

A lo largo de los años este entusiasmo se ha ido contagiando a todas las personas, profesionales o colaboradores amateurs que se han ido sucediendo. Algunos son nombres ya míticos como Ramon Puiggené, Josep Serra i Teixidor, Antoni Maymó; Josep Pané, Josep Bordes y Raida Iglesieas, -la popular pareja radiofónica Pep y Raida- Josep Catellá, Ramon Castellá, Josep Maria Gracia, Ramon Puigené hijo, Paulina Fauste, Montse Colilles, Manel Manonelles, Francesc Fasull hasta la actual directora Gemma Perís, que ocupa el cargo desde hace apenas un año.Durante muchos años Ràdio Tàrrega fue un verdadero fenómeno de masas en la ciudad y en las comarcas vecinas.

De haber habido control de audiencias como en la actualidad seguro que el share habría alcanzado unos índices inimaginables hoy en día. Tenia una programación muy participativa y son legendarios la sección de discos dedicados, los concursos y las emisiones cara al público que se organizaban periódicamente.Esta popularidad se puso de manifiesto a través de la creación del Club de Amigos de Ràdio Tàrrega que alcanzó los 1.500 socios de todas las comarcas de Lleida.

Cada uno disponía de un carné acreditativo y como nexo de unión complementario a la emisora se editó una revista que incluía secciones de contactos, recomendaciones musicales, la programación, consultorio, entrevistas, discos dedicados, entre otras.

Desde hace unos años algunos antiguos socios se reúnen anualmente en una cena de hermandad en la que se reviven viejos recuerdos de juventud y en la que la radio era la gran protagonista.Uno de los programas estrella de la emisora era el concurso artístico de cantantes y rapsodas aficionados. Acudían de toda la provincia y durante el año se llevaban a cabo las eliminatorias en la emisora.

La gran final se celebrara en el Teatro Ateneu que se llenaba a rebosar de un público entusiasta que había seguido todas las actuaciones a través de las cuales ya se había inclinado por uno u otro artista.Hace cinco años la emisora, celebró su medios siglo de vida.

Este año ha cambiado de dirección por jubilación parcial del anterior responsable, Francesc Gasull, un enamorado de la radio, que ha sido substituido por una joven periodista, Gemma Peris. Cuenta con dos veteranos radiofonistas, Josep Castellà y Ramon Puigener y una pléyade de colaboradores de todas las edades e ideologías que le dan pluralidad y es una de sus principales características.

Fuente: La Mañana, España

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