Madrid. Durante el tiempo que el Grupo Zeta ha estado de forma oficial a la venta —en agosto fracasaron las negociaciones con el hombre del acero Alfonso Gallardo—, mucho se ha escrito sobre el interés que los grandes grupos demostraron por activos como El Periódico de Catalunya o Interviú. Sin embargo, pasaron desapercibidas pequeñas joyas que el grupo catalán posee en forma de emisoras de radio.
En concreto, se trata de 25 postes de los que 16 emiten bajo la marca Rock&Gol, fruto de un acuerdo con la cadena Cope.
La importancia de estas emisoras se refleja en el interés que mostraron todos los que son algo en radio cuando llamaron a la puerta del grupo de la familia Asensio: desde la Ser (Prisa) hasta Punto Radio (Vocento) y la Cope, pasando por Mediapro.
Y es que la productora catalana está dispuesta a levantar un completo grupo multimedia en el que, junto a La Sexta y el diario Público y asegurado ya el reino en la producción, echa de menos una cadena de radio. No en balde, se ha presentado a numerosos concursos abiertos de frecuencia modulada (FM) en busca de ser agraciado con alguna concesión.
Como es sabido, el Plan Técnico de FM aprobado por el Gobierno en 2006 aumenta el número de emisoras en 866, que se añaden a las algo más de 900 ya existentes. Pero, de la misma forma, también se sabe que la adjudicación depende de las comunidades autónomas, que son las encargadas de fallar las concesiones vía concursos.
Escaso y limitado
En este contexto, y en un sector tan competitivo como el radiofónico, el crecimiento es directamente proporcional al número de postes que se poseen. Y ahí está la batalla.
Así, y ante la dificultad de lograr concesiones, que son limitadas y otorga el poder político muchas veces en función de la afinidad del grupo, a veces se presenta la oportunidad de comprar emisoras a alguien que ya no está interesado en ellas.
En este caso, y según el estudio general de medios (EGM), la audiencia de las radios de Zeta (Rock&Gol) asciende a 120.000 oyentes diarios (ver cuadro).
Tres escenarios
Según ha podido saber LA GACETA, aunque se reconoce que la venta de estos activos no es una prioridad —ahora que se ha roto el acuerdo de venta con Gallardo—, “según la oferta, se puede cerrar un trato en un par de semanas”.
Pero a falta de que se concreten las ofertas, se abren tres escenarios posibles: mantener las emisoras en alquiler; venderlas al mejor postor y esperar al resultado de las nuevas concesiones. En este último caso, y en función del número obtenido, se estudiaría la creación de una radiofórmula.
Entre los postes que controla el grupo catalán destacan los ubicados en tres municipios de Madrid (Alcorcón, Tres Cantos y El Escorial), Zaragoza, Fraga (Huesca), Onda, Castellón, Alcoy (Alicante), Andorra (Teruel), Villarejo de Salvanés y Avilés (Asturias), a las que hay que añadir las dos emisoras de reciente concesión situadas en las localidades de Ibiza e Inca.
Fuente: La Gaceta, España
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